Hace un tiempo atrás,
entre la niebla lo vi pasar,
el frío rompió la escarcha,
para dejarlo pasar.
Fue un día gris,
agotador lleno de ilusión,
la vida le dijo basta,
y trajo el dolor.
Sin pensar,
que más tarde serías uno más,
con tu cara aún de niño inocente,
y quizás, sin madurar.
Se quedó tu sonrisa perdida,
y sin luz,
la mañana tiño letras de rojo,
en las hojas del tiempo las dejó.
Pedro Juan pirquinero,
a ti te canto esta canción,
entre el polvo del carbón,
quedó durmiendo tu voz, tu voz,
y allá han quedado olvidado,
en un rincón de tu habitación,
los libros un poco estropeados,
de un futuro mejor.
Pedro Juan pirquinero,
a ti te canto esta canción,
tu que trabajaste de sol a sol,
de sol a sol,
el viento irá borrando,
aquella huella que se quedó,
prendida entre piedras negras,
en un pique bajo el sol.
De Lota y Coronel,
son pirquineros más de cien,
que trabajan día a día ,
como tu y aquel.
Hojas de papel,
fue tu mundo del ayer,
tu gran mundo de estudiante,
con mil cosas sin hacer.
Como tu tantos otros,
entregan su valor,
arriesgando sus vidas,
muchas veces sin protección.
Junto a ti se pensaron,
mil cosas sin decir,
compañeros y amigos del deber,
despidiéndote por última vez.
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